Test prenatal no invasivo alternativo a la amniocentesis

Este Test es una prueba prenatal “no invasiva”, lo cual significa que es completamente segura para ti y tu bebé, no existiendo ningún riesgo. Para realizar esta prueba, basta extraer una pequeña muestra de sangre del brazo, como en cualquier análisis de sangre rutinario.

D0RDPM control blood in a laboratory. Image shot 08/2012. Exact date unknown.

La alternativa equivalente es la amniocentesis, que consiste en la extracción de líquido amniótico del saco gestacional realizando una punción con aguja a través del abdomen de la embarazada para analizar el ADN fetal. La amniocentesis presenta un cierto riesgo de aborto.

Durante el embarazo, el ADN fetal también circula por la sangre de la madre. Mediante esta prueba se detecta ADN fetal y se analizan los cromosomas, con lo cual se pueden diagnosticar posibles alteraciones genéticas (al igual que con la amniocentesis). En concreto, Síndrome de Down (o trisomía 21, o sea, tres cromosomas 21, en lugar de dos), anomalías en los cromosomas 18 y 13 e igualmente en los cromosomas sexuales X e Y. En esto consiste el Test Prenatal No Invasivo BÁSICO.

Existe otra prueba más completa que es el Test Prenatal No Invasivo AMPLIADO, que además de lo anterior, detecta “microdelecciones” o, lo que es lo mismo, falta de pequeños fragmentos de cromosomas. Estas alteraciones son más infrecuentes, pero algunas de ellas se han visto relacionadas con algunas cardiopatías congénitas fetales, o sea, alteraciones del corazón fetal, muchas de ellas muy difíciles de diagnosticar solo por ecografía.

La gran ventaja de estas pruebas es que se puede realizar a partir de la 10ª semana de embarazo. En la primera prueba el resultado se tiene en tres días. En el test ampliado, un poco más, 10 días. Con ello, se acortan mucho los plazos respecto a la amiocentesis, con lo cual si hubiera algún resultado alterado, y los padres decidieran no continuar con la gestación, no sería tan complicado como en la amniocentesis (donde la prueba se realiza en la semana 15-16 y los resultados tardan alrededor de tres semanas).

Las embarazadas que acudan a nuestra clínica pueden realizarse cualquiera de estas dos pruebas, mediante una sencilla extracción de sangre como las que se realizan a lo largo de su embarazo.